Estamos acostumbrados a que toda boda tiene que ser perfecta. Una ceremonia bonita, invitados emocionados, la novia con ojos vidriosos, la mirada del novio hechizada como nunca antes se había visto, un banquete, un baile y numerosos gritos de «¡Qué se besen!». Pero la perfección siempre está presente en este tipo de eventos, independientemente del lugar o del modo en que se celebre. ¿El motivo? No deja de ser un acto en el que dos personas muestran ante familiares y amigos que quieren estar juntos para siempre. Todo porque se comprenden, se quieren, se miran y todo tiene sentido. Entonces, ¿merece la pena casarse en tiempos de coronavirus? Si el amor es real, claro que sí.
Casarse en tiempos de coronavirus ¿Merece la pena?
Casarse en tiempos de coronavirus es dar un sí quiero con medidas de seguridad diferentes a las que se habían tomado hasta el momento. Por ejemplo, es dar un «sí, quiero» con una mascarilla que nos tapa los labios, pero que permite transmitir nuestra seguridad y confianza en la otra persona. También es caminar hacia al altar rodeado de todas las personas que queremos, a las que quizás no podamos dar un abrazo, pero sí decirles lo muy agradecidos que estamos de que se encuentren allí. Asimismo, es degustar un delicioso menú que hemos elegido con mimo en unas mesas más alejadas en metros, pero no en emoción. Casarse con precaución sigue siendo casarse, sigue siendo intercambiar anillos, leer poemas, recordar aquellos momentos que nos unen y disfrutar de una jornada en la que toda la gente que nos apoya y se preocupa de nosotros cada día estará presente.
Si algo nos ha enseñado esta pandemia es que la vida es hoy, y debemos disfrutar de todo aquello de lo que tengamos oportunidad sin pensar en el mañana. Si una lección nos ha dado la Covid-19 es que en cualquier momento se pueden ver modificados nuestros planes y, por ello, siempre con la precaución que los profesionales sanitarios nos indiquen, tenemos que apostar por aquello que deseemos hacer en este momento.
Un gran día, un buen fotógrafo
Si tu sueño es casarte, analiza las medidas sanitarias que debes tomar en tu día perfecto: mascarillas, distancias de seguridad o uso de gel hidroalcohólico, entre otras. Pero, ante todo, piensa en lo que vas a vivir: emociones únicas e irrepetibles, anécdotas que contarás el día de mañana al tratarse de una celebración diferente o fotografías con amigos y familiares que hoy la vida permite que sigan a tu lado.
Estos eventos, sin duda, merecen ser inmortalizados con multitud de imágenes que nos demostrarán que fuimos valientes y que nos enfrentamos a tiempos de crisis, transformándolos, mediante la adaptación, en una jornada mágica e irrepetible. Ese es mi cometido, haceros recordar vuestro momento cada día del resto de vuestra vida. De este modo quedará demostrado que la mascarilla puede convertirse tan solo en un complemento más en una jornada cargada de felicidad y emociones reales.
Cada sonrisa, cada gesto e, incluso, cada palabra quedarán reflejados en un amplio trabajo profesional que hablará de vosotros y de vuestra historia. También de quienes os rodean. Reflejará sentimientos y eternizará momentos. Además, os hará creer en lo que tenéis cada vez que abráis ese álbum que os recordará que, si hay algo importante en una boda, son los sentimientos auténticos de los protagonistas.
Medidas sanitarias
Por supuesto, la responsabilidad también es mi fuerte. Por ello, si contáis en vuestro enlace con mis servicios, encontraréis seguridad. Sin duda, contaréis con un profesional que estará pendiente de todas las medidas que en la actualidad se llevan a cabo.
Mi misión es sorprenderos y añadir un toque mágico a vuestro día. Así, si estáis pensando en realizar la boda y contar con un buen fotógrafo de bodas en Valladolid o cualquier otra provincia de Castilla y León, solo tenéis que contactar conmigo para organizar vuestro día especial recordando solo el motivo que os llevó a su organización.
